martes, 9 de junio de 2015

SILENCIO

 Hay silencios que matan, silencios incómodos, silencios a gritos, silencios imprescindibles, silencios opresivos, silencios reparadores, tantos tipos y todos tan necesarios...

La ausencia de sonido en general nos suele provocar desasosiego, eso de que " No news good news" debe ser muy americano pero en esta tierra tan aficionada al grito y la algarabía no lo llevamos muy bien y la ausencia de noticias solemos malinterpretarlo como  enfado o desidia por parte del ausente ( que conste que entono desde ya el mea culpa )

Que cierta esa frase de que sabes que estás con un buen amigo cuando los silencios no son incómodos, cuando no es necesario buscar palabras salvadoras que eviten esos momentos de silencio mirando al vacío como un naufrago busca la línea de costa, cuando no ocurre nada por estar unos días sin saber nada de él o de ella, cuando no hay reproches ni malos gestos por esos silencios.

Todos necesitamos nuestros silencios, no comparto en absoluto el aforismo de Francis Bacon de que el silencio es la virtud de los tontos, sino pienso mas bien   que somos esclavos de nuestras palabras pero dueños de nuestros silencios, y que puedes estar callado y parecer idiota y abrir la boca y confirmarlo.

Todos necesitamos esos momentos de alejarnos del mundanal ruido y oír solamente nuestro propio corazón bombeando ya que es la única forma de pensar, de apreciar el sonido de una risa, de una voz...

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