lunes, 18 de febrero de 2013

NADA QUE AÑADIR


 Domingo por la noche, finalmente logras tirarte en el sofá después de un fin de semana en el que han invadido tu casa todas las hordas familiares y vecinales habidas y por haber, y tras el sexto lavavajillas sacado te dispones a despejar la mente buceando en el libro que llevas dos  días sin poder coger...

O eso te crees tú... del marco de la puerta surge la figura menuda de tu hijo pequeño embutido en su pijama de spiderman, y con cara de preocupación y gran concentración se sienta a tu lado, te mira con sus enormes ojos verdes y te suelta a bocajarro:

- Mamá. ¿ porque soy tu hijo?

Por un momento piensas comenzar con la historia de la semillita y la plantita que crece en la tripita... pero lo meditas dos veces y consideras que con sus sieis años recién cumplidos no es esa la respuesta que está esperando oir.. tragas saliva y te lanzas al vacio

- Pues porque mamá encargó un niño muy guapo y simpático y te trajeron a ti..

Vuelves a tragar saliva, evidentemente no tienes la tarde muy lúcida para entrar en conversaciones metáfisicas de ese tipo...

- ¿ Pero porque de entre todos los niños que había en el cielo me trajeron justamente a mi? ¿ Y porque de entre todas las mamás del mundo tú eres mi mamá?

Ya de perdidos al río, buscas rápidamente una respuesta impepinable que os deje contentos a los dos:

- Porque Jesús es muy listo y lo sabe todo  cariño, y sabía que yo era la mamá que más te iba a querer y cuidar y que tu eras justo el hijo que yo quería.

Su sonrisa resplandece, has acertado de lleno, se abraza a tí y te dice "  Qué listo es Jesús mamá, porque yo siempre voy a ser tu hijo"

Irrefutable

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