Nací un soleado día de otoño allá por año 1975. Cuando daba mis primeros berreos Franco celebraba por última vez su fiesta grande ( fallecería apenas 50 días después, oficialmente...), mi padre celebraba el nacimiento de su primera fémina después de 3 varones llamando a sus conocidos y amigos por un aparato antediluviano color crema que estaba en el medio del salón anclado con un cable a la pared, que más tarde evolucionó en lo que hoy denominamos "móvil" e invitando a sus compañeros de trabajo a una ronda de cafés abonándolos en pesetas, por supuesto.
Debido a los frecuentes viajes de mi progenitor a Londres mi madre me envolvía las posaderas en unos inventos desconocidos por estas tierras patrias llamados "pañales" que tiraba a la basura una vez que habían cumplido su cometido, y así se evitaba el engorro de andar limpiando mierdas ( con perdón y por muy mías que fueran...)
Mi abuela por fin pudo colocarme su faldón rosa lleno de lazos ( algún trauma me habrá quedado de aquello, lo sé...), puesto que no existían ecógrafos ni pruebas diagnósticas hasta que el enano/a no asomaba sus partes nobles no se sabía si la habitación iría en rosa o en azul.
Todo esto ocurrió hace más o menos cuarenta años, amigos este 2015 se cumplen cuarenta años de mi feliz venida al mundo y de la de la mayoría de mis conocidos, y dado que tengo ya programadas 3 fiestas de cumpleaños para celebrar esta efeméride los próximos 3 fines de semanas sospecho que voy a pasar el año con un gorro de papel y un matasuegras y visualizando vídeos emotivos y lacrimógenos del trascursos de estos 40 años por nuestras carnes.
También he de decir que 2 de ella son sorpresa, y teniendo en cuenta que dado que desde verano hasta hoy con estas son ya 4 las fiestas sorpresa a las que asisto lo que empieza a ser sorpresa es que no sea sorpresa....
Lo dicho, y antes que nada FELICIDADES A TODOS LOS CUARENTONES¡ Vamos a celebrarlo¡¡¡¡¡
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