Tras más de un año oyendo acerca de su maestría en el mundo de la fisioterapia, y acuciada por un incesante dolor cervical finalmente me decidí a visitar al Doctor Milagro.
Como es costumbre en mi acudí puntual a mi cita con el barbudo personaje que resultó ser de mi quinta.
- " Bueno,¿ y que te pasa? " Me espetó una vez acomodada en la consulta
- " Pues mira, me duele muchísimo las cervicales de toda la vida.. y eso me provoca unas migrañas brutales"
le contesté
-"Ya veo... déjame que te haga unas preguntas... ¿ Te molesta la luz? ¿ Tienes fobia a los espacios cerrados y con mucha gente?"
Superado el shock inicial y tras verificar mentalmente que estaba en la consulta de un fisioterapeuta y no de un psicólogo le contesté que si a ambas preguntas, lo cual le provocó una gran satisfacción por lo visto, a continuación me pidió que me quedara en ropa interior, y una vez evaluado por mi parte mis posibilidades de darle una patada en la huevera y salir pitando en caso de que lo siguiente fuera que me tumbara en la camilla con los ojos cerrados le obedecí, total, después de tres partos una ha perdido bastante el sentido de la vergüenza y el pudor.
Una vez revisada de arriba abajo haciéndome sonar todas las articulaciones, y sin prestar demasiada atención a mi cuello ( motivo de mi visita y mis dolores)terminó por asertar tipo " Elemental querido Watson, creo que ya he encontrado el problema, lo que ocurre es que no ves bien por el ojo izquierdo, y por ello tu cuerpo compensa esta falta de visión y adopta posturas forzadas con el cuello que te provocan los dolores y por ende las migrañas..."
Aún lo estoy asimilando.. tanta pasta gastada en masajes terapéuticos en el cuello y lo que necesitaba eran unas gafas¡
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