viernes, 18 de mayo de 2012

EL POLO POSITIVO


 Soy fíbica y fóbica.Lo reconozco. Es una cuestión de piel y no puedo evitarlo.
Al igual que el protagonista de " Todo lo que podríamos haber sido tú y yo sino fuésemos tú y yo" tengo un don, con mirar a una persona ya sé, con un mínimo margen de error si esa persona va a entrar en el mundo de draga, es decir, si vamos a conectar o si por el contrario pasará a engrosar la lista de personas intranscendentes que todos contamos por cientos en nuestras vidas.

Y no tiene nada que ver con los prejuicios, es indiferente si me han hablado bien, mal o regular de esa persona, nada más verla detecto unas vibraciones que me atraen, como si fuera el polo positivo de un imán, o me repelen como si fuera el negativo...

Pienso que  las personas somos imanes, desprendemos esas vibraciones, hay quienes irradian esa magia , tienen estrella, hay algo irracional que hace que el resto de humanos busquemos su compañía, son personas alegres, independientemente de la suerte que tengan en su vida, son polos positivos.

En el lado contrario están aquellas otras personas que evitas a toda costa, también de forma irracional, parece que te absorben la energía, son capaces de convertir una cena en un sufrimiento insoportable, toda su vida son problemas, sus conversaciones son deprimentes, son el polo negativo.

Y lo peor de todo es que me parece imposible cambiar el signo de estos polos, es como si nos cargaran positiva o negativamente al nacer y así viviremos toda la vida... intentar cambiar un polo negativo es algo así como que Sergio Ramos meta un penalty...

Yo, por mi parte tengo mi mundo lleno de polos positivos, será porque ya desde hace tiempo evito las malas energias, será porque soy muy afortunada, será porque yo soy uno de ellos....



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